Laboratorio de pruebas de Herman Miller

En lo profundo del corazón de Portal Mill, nuestra sede y planta de fabricación en el Reino Unido, hay un departamento oculto pero crítico que los clientes rara vez visitan y que está envuelto en misterio. Únete a nosotros mientras revelamos el laboratorio de pruebas de

Llevamos más de 70 años poniendo a prueba nuestras sillas (y escritorios y accesorios). Realizamos pruebas no solo según los estándares internacionales y globales, sino también según nuestros propios estándares internos, utilizando cargas más altas y mayores repeticiones para garantizar que nuestra garantía de 12 años cumpla con tus expectativas en todos los productos que diseñamos. Y cuando presentamos productos tan innovadores que aún no existen estándares en la industria, nuestro equipo de ingenieros a menudo lidera el camino al crear pruebas para evaluar exhaustivamente el rendimiento y la calidad a lo largo del tiempo. Estimamos que el 50 por ciento de las pruebas realizadas en nuestras instalaciones no las realiza ninguno de nuestros competidores.

Nuestro proceso de prueba de sillas consta de seis etapas principales:

Foto de la prueba de un millón de ciclos a la que se someten todas las sillas Herman Miller, que reproduce 12 años de uso continuo.

La prueba del millón de ciclos

Esta prueba replica 12 años de uso continuo, las 24 horas del día, cubriendo el equivalente a cómo se usa una silla a lo largo de 3 turnos.

Incluye la prueba de carga, que implica dejar caer un peso sobre el asiento, y la prueba de resistencia al desgaste del respaldo, en la que éste se reclina completamente bajo fuerza. Ambos imitan a clientes que se sientan y se reclinan varias veces al día durante un período prolongado. Todas nuestras sillas pasan por este riguroso proceso, que tarda casi 4 meses en completarse.

La prueba de caída

Además de la prueba de carga, se deja caer un peso de 130 kg sobre el asiento desde 150 mm cuatro veces: dos veces con una carga funcional y dos veces con una carga mayor mientras la silla está en su configuración más alta y más baja.

Foto de la prueba de doble brazo que reproduce el peso, la presión y el desgaste a los que se someten todas las sillas Herman Miller.

La prueba de los dos brazos

Todos somos culpables de haber usado los apoyabrazos para levantarnos de una silla, poniendo nuestro peso y presión sobre ellos. La prueba de los dos brazo aplica una presión desigual en cada brazo 60 000 veces para replicar esa actividad 10 veces al día, 5 días a la semana durante más de 20 años. Solo cuando ambos brazos siguen estructuralmente estables y en pleno funcionamiento pasan la prueba.

Foto de la prueba de giro que reproduce la acción de las sillas girando más de 60 000 veces, a la que se someten todas las sillas Herman Miller.

La prueba del giro

Girar puede ser estresante. Tal vez no para los que estamos dando vueltas, pero ciertamente para las ruedas giratorias y la base de la silla. En la prueba de giro se realizan más de 60 000 giros en cada dirección para simular todos los giros que una silla puede necesitar realizar.

La prueba de choque y humedad

A medida que ampliamos nuestra oferta en todo el mundo, se volvió obvio que debíamos tener en cuenta los distintos climas, así como el transporte físico de mercancías desde nuestra principal planta de fabricación en el Reino Unido hasta Europa continental. Esto dio como resultado la prueba de choque y humedad y la prueba de transporte.

Esta prueba se lleva a cabo durante 3 semanas, exponiendo nuestros productos a temperaturas extremas de -18 °C hasta 60 °C y una humedad de choque de 48 °C al 80 % de humedad (¡mejor ellos que nosotros!).

Foto de la prueba de transporte que muestra las sillas embaladas y empaquetadas en un contenedor de envío. Se dejan caer las cajas reproduciendo el proceso de envío para garantizar que todas las sillas Herman Miller llegan en perfecto estado.

La prueba del transporte

Durante la prueba de transporte, nuestras sillas y escritorios se embalan y se dejan caer seis veces sobre varias caras, bordes y esquinas antes de someterse a un viaje de prueba de ida y vuelta a Escocia, lo que pone nuestro embalaje en el centro de atención para garantizar que pueda soportar todo que se le arroje.

Las pruebas anteriores solo se refieren al artículo terminado. También hay una gran cantidad (estimada en más de 2000) de pruebas que se llevan a cabo en materias primas y componentes individuales. Entre las novedades destacables se incluyen pruebas para la reciente introducción de pegamentos a base de agua más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, que nos ayudan a alejarnos de las sustancias más tradicionales y, al mismo tiempo, garantizar que sean aptas para nuestro propósito y resistan el desgaste a lo largo del tiempo.

Foto de algunas de las máquinas utilizadas para probar todas las sillas de oficina Herman Miller.

Chris Owen, director de pruebas y conformidad europea, afirmó: "Realizamos pruebas al percentil 95 de los consumidores europeos, teniendo en cuenta múltiples requisitos para satisfacer las necesidades de los ciudadanos en nuestros mercados europeos. Nuestros laboratorios de pruebas diseñados a medida nos permiten realizar pruebas las 24 horas del día, los 7 días de la semana, durante muchos meses seguidos. Al realizar pruebas tan exhaustivas, no solo garantizamos que la calidad sea constante y que nuestros productos resistan el paso del tiempo, sino que también lo aprovechamos como una oportunidad para aprender, perfeccionar nuestros diseños y desarrollar nuevos materiales que nos ayuden a mejorar nuestros productos en el futuro".